Cómo dirigir un equipo de trabajo y convertirlos en líderes de acero

¿Sabes cómo dirigir un equipo de trabajo? ¿Estás tomando el rumbo correcto?

Posicionar una empresa en el mercado hoy en día, es mucho más complicado de lo que uno puede imaginar. Y más, si se trata de liderar grupos humanos, que estén dispuestos a seguir los lineamientos estratégicos de la empresa.

Pero, la duda es la siguiente, ¿qué tan comprometidos están los colaboradores con las empresas? y

¿qué tan comprometidos están las empresas con los colaboradores?

Estas interrogantes pueden ser cruciales para muchos jefes de área, pero para otros, puede ser el inicio de una conversación, acerca del mundo caótico que viven dentro de la empresa.

Pocos conocen bien a sus colaboradores, tampoco saben ¿qué es lo que aspiran?, ¿qué es lo que quieren lograr en su vida?, ¿tienen familia?, ¿tienen hijos?, ¿disponen de buena salud?, y tantas interrogantes que no son resueltas por algunos jefes de área.

Con exactitud no podemos decir cuál es motivo de sus acciones; sin embargo, no cabe duda que la falta de empatía en las empresas, puede llegar a matar aspiraciones y conllevar a sus colaboradores a tomar dos caminos: la renuncia o trabajar por cumplimiento.

Pero trabajar por cumplimiento, ¿qué mérito tiene para el colaborador y la empresa?

¡Ninguno!

Así que no esperes llegar hasta esa situación y empieza a poner en práctica estas pautas con tu equipo de trabajo.

1. Evalúa el estado de tu empresa: No esperes que segundas o terceras personas te brinden información acerca del comportamiento de tus colaboradores.

¡Sal de tu oficina!, conócelos, descubre su día a día, devela la verdadera realidad de tu empresa.

2. Conoce a profundidad a tus colaboradores: Sabemos lo importante que es la privacidad, pero es fundamental que sepas acerca la vida, que es lo que aspiran como colaborador y profesional. No solo basta con instruirse mediante una ficha informativa o un curriculum vitae. Conócelo, escúchalo, conversa, conviértete en su amigo.

¡Forma una familia empresarial, no solo un negocio!.

3. Ofrece un salario acorde a su experiencia: Las necesidades abundan, pero un sueldo no bien remunerado ¡mata el incentivo a crecer!.

4. Capacítalo: El crecimiento profesional de tus colaboradores es de gran importancia, pues, no solo él crece, sino, también repercute hacia la empresa.

5. Respeta sus horarios laborales: No hay peor frase escuchada: ¡nadie se va, mientras no terminen!. La explotación es el enemigo de las personas. Toma en cuenta que si es de extrema urgencia cada solicitud, debes primero planificar las funciones y entregas diarias. Eso aliviará muchos dolores de cabeza y malestares a todo tu equipo de trabajo.

6. No abuses de tu autoridad: A nadie le agrada que le traten mal, ni mucho menos que las faltas de respeto sean el pan de cada día.

Para que exista respeto en tu empresa, debes predicar con el ejemplo y no por un cargo.

7. Evalúalo: En todo momento existe una oportunidad para aprender, por eso, es importante ponerlos a prueba.

Ten en cuenta que deben estar preparados ante alguna situación.

Recuerda, la evaluación puede ser escrita, oral, experimental. ¡Sé constante, pero no los agobies!

8. Comparte experiencias en equipo: Un momento de diversión no le hace mal a nadie y qué mejor que disfrutar un día de campo en conjunto, aunque debido a la coyuntura debemos explorar nuevas formas de camaradería de manera virtual.

Deja la oficina, corbatas, documentos y ponte ropa cómoda para recrearte con tu equipo de trabajo. 

¡Dile adiós al estrés y preocupaciones!

Toma en cuenta que antes de formar un negocio, formas una FAMILIA. 

Y antes de formar jefes de área, formas LÍDERES DE ACERO.